En los inicios de su carrera como abogado, Tom Livne vio cuánto tiempo y dinero se gastaba en transcripciones. Emprendedor de corazón, se inspiró para crear un servicio de transcripción basado en tecnología y no en trabajo manual. Identificó un océano azul de oportunidades al reconocer cuántas industrias, incluidas la educación, los medios de comunicación y la vertical empresarial, podrían también obtener grandes beneficios utilizando transcripción generada por inteligencia artificial. Livne y su pequeño equipo construyeron una máquina de reconocimiento de voz automático, basada en inteligencia artificial que, además de transcribir, era capaz de subtitular (caption) contenido de audio y video para satisfacer estas necesidades.
La tecnología ha madurado para ofrecer soluciones en vivo que se adaptan al trabajo remoto y a las necesidades de accesibilidad de los estudiantes y de cada discapacidad en tiempo real. Un equipo de 30.000 transcriptores profesionales que trabajan a demanda también garantiza a los clientes una precisión superior al 99% al comprobar el funcionamiento de la tecnología. El resultado: Verbit está empoderando a las personas en su educación, agilizando los flujos de trabajo, simplificando vidas y, a pesar de ser complejo, brindando una tecnología intuitiva y fácil de usar.